Consumir bebidas alcohólicas con moderación
Es recomendable no superar los 20-30 gr. de alcohol diarios. Los hombres no deberían sobrepasar un máximo de 30 gr. Diarios; en las mujeres, el límite queda en 20 gr. al día. El consumo excesivo de alcohol se ha relacionado con los cánceres de hígado, esófago, intestino delgado y grueso, faringe, laringe, cavidad oral, mama y páncreas.
La ingesta de alcohol en fumadores aumenta el riesgo de contraer cáncer de tracto digestivo alto y vía aérea superior. Como ejemplo 30 gr. de alcohol corresponden a:
Comer un mínimo de 25-30 gr. de fibra al día
La dieta rica en fibra parece proteger al organismo contra los cánceres de colon, estómago, y probablemente, contra el de mama. Añadiendo REGULARMENTE a nuestra comida alguno de los siguientes productos, conseguimos las cantidades recomendadas de fibra:
Reducir la ingesta de grasas por debajo del 30% de calorías totales diarias
Hay que aumentar el consumo de grasas insaturadas contenidas en los aceites de origen vegetal (oliva, cacahuate, maíz, girasol y soya) en detrimento de las grasas saturadas, principalmente las de origen animal (carnes, huevos y lácteos).
El ácido graso omega 3, grasa poli insaturada, procedente del pescado, podría ayudar a prevenir los cánceres de mama, ovario, útero y próstata. Una dieta con alto contenido en grasas saturadas puede aumentar el riesgo de contraer cáncer de colon, mama, próstata, ovario, útero y piel.
Moderar el consumo de determinadas conservas (ahumados, adobados y salados)
En la superficie de los alimentos ahumados hay unas sustancias llamadas benzopirenos que son potencialmente cancerígenas. El abuso de este tipo de conservas se ha relacionado con los cánceres de nasofaringe, esófago y estómago.
Comer regularmente frutas, verduras y hortalizas
Aportan a nuestra dieta agua, vitaminas y minerales, evitando un exceso de grasas y proteínas. Dietas pobres en frutas y verduras se han relacionado con los cánceres de pulmón, laringe, orofaringe, esófago, estómago, colon, recto y páncreas.
Elegir carnes magras y pescado en lugar de carnes rojas
Evitar las carnes rojas como res, vaca, cerdo y cordero puesto que parecen estar en relación con el cáncer de colon y recto. Es conveniente sustituirlas por carnes magras, como pollo, conejo, pavo y pescado.
Consumir productos ricos en antioxidantes
Los antioxidantes son un grupo de micronutrientes entre los que destacan las vitaminas A, C y E. Se cree que los alimentos que contienen antioxidantes protegen contra los cánceres de orofaringe, laringe, esófago, estómago, colon, pulmón, vejiga, cuello de útero , mama y páncreas. Los alimentos frescos, en general, son ricos en antioxidantes.
Seguir métodos de cocción correctos
Si se consumen alimentos fritos, hacerlo de forma moderada y evitando la reutilización excesiva del mismo aceite. Asar a la parrilla, cocer al vapor, hervir y cocinar en microondas nos ayuda a cocinar con poca grasa.
Creado: 2019-02-05 09:22:34
Última vez actualizado:
2019-06-03 13:14:22